Intelectual 13: Frustrado

Notas: Han pasado aproximadamente dos meses desde que Tom y William viven juntos.

Intelectual” Fic de MizukyChan

Capítulo 13: Frustrado

Tom gruñó, dejándose caer en una silla junto a Gustav, eran pocas las ocasiones en que sus horarios coincidían en períodos libres, así que lo que menos quería hacer era quejarse, pero la mirada siempre atenta del rubio, le obligó a abrir la boca y soltar su malestar, sin ningún grado de glamour.

Si no me acuesto con alguien, se me van a caer las pelotas —un nuevo gruñido escapó de sus labios, mientras el rubio lo miraba con una sonrisa de lado.

Pese a que estudias artes, tus palabras no tienen ni un atisbo de poéticas —respondió Gustav, dando una palmada al hombro de su amigo—, pero creo entender lo que ocurre.

¿Ah, sí? —preguntó Tom, girando para verlo de frente.

Es por William —contestó con simpleza, Tom volvió a gruñir, bajando la cabeza—. Todo era muy divertido al principio, ¿no? Dejando que analizara a tus citas, para comprobar si eran lo que necesitabas, si no estaban interesadas sólo en el dinero y cosas por el estilo —el rubio prosiguió con una sonrisa—. Pero nunca pensaste que tu vida sexual, que era notoriamente más activa que la de un universitario promedio, se vería drásticamente afectada por tu compañero.

Si somos honestos, Will no tiene nada que ver, él nunca me ha prohibido que salga con tal o cual mujer —respondió el castaño, pasando una mano por su creciente barba.

Pero sí te afecta, Tom, él es tu compañero, te preocupas por lo que piensa —puso una mano en la rodilla de Tom y repitió—. Te preocupa lo que él piensa de ti.

¿De quién hablan? —Preguntó Georg, uniéndose a los chicos en la mesa de la cafetería.

Hablamos de las pelotas de Tom, que están tan moradas, que están a punto de caerse —respondió Gustav, resolviendo poner un poco de humor a la situación.

Georg soltó una risita—. Si no te conociera, Tom, diría que Trumper te tiene con una correa al cuello —comentó, sonriendo ampliamente ante la actitud del barbudo—. Parecen un matrimonio.

No es eso —Tom negó con la cabeza.

Sí, es eso —insistió Listing—. Él está pendiente de ti y tú estás pendiente de él, viven juntos. Dios, hasta duermen juntos, lo único que les falta es tener sexo.

Compartimos piso, Geo —se defendió el barbudo, pero entendía perfectamente lo que sus amigos decían, porque era cierto. Se preocupaba demasiado por Will y aunque al principio creyó hacerlo sólo por lo que Alice le contó sobre Will y su refugio, no podía negar que le afectaba mucho pensar lo que Will haría si sabía que seguía con su antigua vida de promiscuo—. No soy gay y Will tampoco. Él no ve las cosas de ese modo.

Ok, está bien —intervino Gustav, notando la tensión en los hombros de Tom—. Tenemos un problema entre manos, es hora de resolverlo como adultos, propongamos soluciones.

La secretaria de tu padre —respondió Georg con rapidez—. Ella es guapa y está acostumbrada a ti. Además, conoce a Trumper.

Justamente por eso está descartada —agregó Tom, con una sonrisa, evocando el recuerdo de la primera vez que Will llegó a su departamento—. Nunca les conté, pero… —soltó una risita y agitó la mano—. No, es mejor sacar a Pam de la ecuación.

¿Qué tal, Irene? —sugirió Gustav—. La chica de primer año de Ingeniería Comercial, es hot.

Y así comenzaron a mencionar nombres de las chicas guapas del campus, sin embargo, Tom sabía que no podría hacerlo. Sus días de folladas de una noche habían terminado.

.

Al llegar a casa por la tarde, Tom se sorprendió de ver a Will en la sala y no en su estudio, como habitualmente lo encontraba.

Hola Will, ¿estás bien? —preguntó, dejando la mochila en el suelo, para sentarse junto al rubio en el sofá.

Sí —fue la corta respuesta del joven que mantuvo los ojos fijos en las facciones del castaño—. Tu barba está mucho más abundante.

Tom pasó una mano por su rostro, sintiéndose de pronto, demasiado expuesto ante la escrutadora mirada de su compañero. Sabía que hacía deducciones sobre él y eso lo hacía sentir desnudo.

Gustav me llamó —dijo William, captando la atención del otro—. Necesita que le ayude más tarde con un ensayo para economía. No se le dan muy bien las palabras para expresar conceptos matemáticos.

Estás mintiendo —respondió Tom, con una sonrisa divertida.

Trumper frunció el ceño—. ¿Qué?

Tú mismo me enseñaste que sólo las mentiras necesitan detalles —respondió Tom—. Con un “voy a ayudar a Gustav con una tarea” habría bastado.

Oh… —dijo William, aunque fue más bien un suspiro.

¿Entonces? —preguntó Tom.

Entonces, ¿qué?

¿Vas a contarme de qué va todo esto? —insistió el barbudo—. ¿Tu conspiración con Gustav?

William se enderezó en el asiento y respondió—. Me reuniré con él, mientras tú te reúnes con Heidi Klum.

¿Heidi? ¿Por qué me juntaría con Heidi? —contestó Tom, confundido—. No la he visto desde el condenado almuerzo de negocios de mi padre.

Yo concerté una cita con ella… a tu nombre —dijo Trumper, sacando una tarjeta con datos escritos—. Ahí está la hora y el nombre del restaurante.

¿Por qué hiciste algo así, Will? —Preguntó Tom y se pasó una mano por el cabello, resoplando—. ¿Qué te dijo Gustav?

Nada, sólo mencionó detalles que no había notado sobre ti y tu frustración sexual —respondió el rubio, levantándose del sofá, pero no alcanzó a dar un paso, porque Tom lo sostuvo por la muñeca.

Sólo estoy estresado, Will, estoy presionado por mi padre —suspiró—. Tengo que aprobar todos los ramos de la universidad, es sólo eso.

Y está científicamente comprobado que el sexo ayuda a liberar al cuerpo y a la mente del estrés —agregó el rubio, retomando su voz robótica.

Tom exhaló ruidosamente y dijo—. No me quiero acostar con Heidi.

¿Por qué no? Ella es madura, la experiencia es importante —agregó—. Además, ella es millonaria, no quiere escándalos, sólo un desahogo físico y ha mostrado claros indicios de interés en ti. Tú eres un hombre joven, atlético y atractivo, para los estándares.

Tom resopló—. ¿Para los estándares? ¿Qué demonios significa eso? —se quejó—. Soy guapo, estoy muy por encima del estándar. Punto.

Ambos se miraron y soltaron unas risitas.

El teléfono de Trumper sonó y dijo—. Mi Uber está aquí. Adiós, Tom. Que te diviertas.

Y sin darle a Tom tiempo de decir nada, dejó el departamento.

&

Tom tuvo una velada encantadora, Heidi lo hizo sentir muy bien, tanto con su conversación educada, como con sus conocimientos en el arte de la seducción.

Con un suspiro, sacó las llaves de su morada. No era ni media noche cuando Tom entró en el departamento, caminando en silencio hasta el baño, donde procedió a ducharse, para quitarse el olor a perfume y otras cosas.

Al salir, fue hasta el despacho de Will, pero todo estaba a oscuras. Caminó hasta la habitación, pero no había rastro de su compañero. Sacó su celular, pero no había textos, ni nada.

Con el ceño apretado, marcó el número de Gustav—. ¿Dónde está Will?

Tom, es media noche —se quejó el rubio.

Will no está aquí —respondió—, tú lo llamaste, así que debe estar contigo —de pronto su tono de voz se endureció—. Quiero hablar con él, ponme al teléfono con Will.

William no está aquí, Tom.

¿Qué? ¿Cómo? Dijo que te ayudaría.

Media hora. Es todo lo que tomó hacer el ensayo. No me ayudó, lo hizo él solo —contestó el rubio, con tono culpable—. Lo siento.

Bien, Gus, que bueno que lo sientas —cortó la llamada y pinchó el número uno en marcación rápida—. Vamos, vamos, Will, contesta —pero la llamada fue directo al buzón de voz.

Maldiciendo con los dientes apretados, Tom buscó el número de Alice en sus contactos y llamó. No le importó la hora, no le importó que la mujer lo fuera a insultar. En esos momentos no le importaba nada más que saber dónde diablos se había metido Will.

Está aquí. Duerme, llama mañana —respondió la voz adormecida de la mujer y luego cortó.

Tom regresó a la sala y soltó un suspiro. Al menos Will está a salvo. Pensó, pero eso no hacía que su pecho doliera menos o que el nudo en su garganta fuera menos intenso.

& Continuará &

Prometo que no habrá más drama que esto. Este fic es para suspirar y reír, así que sigan leyendo, porque esto era necesario para lo que viene ahora.

Gracias por seguir apoyando la historia. MUAK.

Escritora del fandom

3 Comments

  1. Creo que es hora de que esos dos consideren seriamente que al menos sin bi, porque sino solo se frustraran y perderán la oportunidad de encontrar el amor.
    Gracias!!!! 😘

    • No te preocupes, ya van a entender qué pasa entre ellos jijijiji

  2. Creo que fue acertada la inclusión de Heidi en el fic en cuanto a que encajó muy bien la percepción de Will de ella y los beneficios de su posible relación con Tom.
    Pero lo que amé del capítulo fueron dos cosas; que Tom regresó a casa buscando a su Will y que el rubio le diera la privacidad que creía necesaria para su compañero aunque eso significó sacrificar su tiempo en casa y con Tom.

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