«Revoltoso» Fic Toll de MaryKaulitz
Capítulo 20
—Dejen de pelear, hemos llegado —avisó Gordon estacionando el auto.
Bill miro a Tom antes de que bajaran—. Te amo —murmuró en el oído de Tom antes de salir rápidamente del auto. Tom se quedó mirando torpemente la puerta por la que había salido su novio. Sonrió.
—¡Espérenme! —grito saliendo del auto.
—¿Qué te demoro tanto? —preguntó Bill sonriéndole mientras le tendía la mano.
—Oh… —Tom se sonrojo—. Me tomo por sorpresa, pero… yo igual te amo —confesó sonriendo.
—Ahora que todos nos amamos —interrumpió Gordon suspirando—. Ayúdenme a elegir un pastel para Simone; hay demasiados y todos me están llamando, ¡ay Dios mío, qué cosas más lindas! —dijo mirando los pasteles—. Hola bebecitos, son todos tan hermosos, si pudiera me los llevaría todos, y me los comería solito en el baño…
—¿Qué le pasa? —pregunto Bill en murmullos mientras miraba a su suegro hablarle a los postres.
Tom se encogió de hombros—. Por algo está casado con Simone, hace eso cada vez que estamos aquí… se cree el Doctor Dulittle*, pero especialista en postres.
Bill asintió—. ¿Lo ignoro? —preguntó al final. Tom asintió.
—Sí, y mientras él habla con los pasteles, nosotros debemos elegir uno… —explico Tom—. Por eso quise venir, aparte del regalo, él se demora demasiado comprando.
—Bien —dijo Bill riendo mientras veía a su suegro sentado frente al mostrador de pasteles.
—¿Qué piensas de ese? —preguntó Tom mirando uno de los pasteles.
—No —Negó Bill—. Es muy rosado. ¡Mira este! —exclamó mirando otro pastel.
—Muy blanco —desechó Tom.
—Pero es elegante —dijo Bill frunciendo el ceño.
—Se ve muy… inexpresivo —dijo Tom haciendo una mueca.
—Bien —dijo Bill bufando—. ¿Éste? —preguntó de mala gana, apuntando a cualquiera.
—¡Ese es perfecto, Bill! —exclamó Tom abrazándolo felizmente.
—Lo sé, soy genial —dijo Bill riendo.
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—Llegamos —dijo Tom entrando a la casa. Detrás de él venía Bill con un par de bolsas, y Gordon con el pastel.
—¿Qué compraron? —preguntó Natalie llegando junto a su hermano.
—Yo le compre un chocolate… con el dinero de papá —admitió Tom sonriendo—. Papá compro el pastel, y Bill le compro una blusa muy hermosa —Terminó mientras entraba a la cocina.
—Genial —dijo Natalie—. Nosotros tenemos las cosas listas; los tomates picados, la palta molida, las vienesas cocidas, el pan caliente, nos faltan los jugos y bebidas.
—Bien —dijo Tom poniéndose como líder—. Tenemos que esperar a que llegue… Bill, ¿crees que podrías hablar con tu padre para que salga antes? —preguntó mirando a su novio. Bill asintió—. Bien. Natalie y Chantelle, vayan al frente a comprar cosas para beber, oh, y compren Papas Lay’s, Cheetos o Ramitas**
—Está bien —dijeron ambas antes de salir.
—Andreas y Gustav —dijo Tom mirando a los hermanos—. Su trabajo es ordenar la mesa.
—Ya —dijo Andreas comenzando a sacar de la mesa, las cosas que no utilizarían.
—Anis, y Paul. Es su primera vez como invitados, así que puedes sentarse a ver la televisión hasta que todo esté listo o unirse a cualquier tarea que deseen —habló Tom mirándolos—. Y Georg, Marcus… busquen una habitación y piérdanse por un tiempo —pidió haciendo una mueca.
—Hey —reclamó Georg tratando de separarse de Marcus—. No es justo.
—¿Me acompañas? —preguntó Marcus al oído de Georg.
—No —respondió Georg. Aunque se levantó igual cuando Marcus comenzó a arrastrarlo hacía las escaleras.
Bill se alejó del grupo, viendo como todos armoniosamente trabajaban para formar un cumpleaños. Saco su celular, y marco a su padre.
—¿Sí? —Se escuchó desde el otro lado—. ¿Quién es?
—Padre, soy Bill —saludó Bill rodando los ojos.
—¡Oh, Bill! —exclamó Jörg—. ¿Qué pasa? Estoy algo ocupado…
—Verás… —comenzó Bill mordiéndose el labio—. Simone está de cumpleaños, y nos preguntábamos si sería posible dejarla salir antes —dijo de corrido.
—Oh… —Jörg guardo silencio.
—¿Padre? —pregunto Bill ansioso.
—Está bien —aceptó Jörg al final. Bill le hizo señas positivas a su novio. Tom sonrió acercándose.
—Si quieres, puedes invitarlo —murmuró Tom llegando a su lado.
—Espera un poco, papá —dijo Bill tapando el celular, para que su padre no escuchara—. ¿Estás seguro? No quiero que den problemas —susurro lo más calladamente posible.
Tom rio—Claro que estoy seguro. La última vez que lo vi, también fue la primera, y no resulto muy bien; debemos repararlo.
—Bien —aceptó Bill volviendo a hablarle a su padre—. Dice Tom que puedes venir, si quieres —dijo ya más calmado.
—Genial —dijo Jörg—. ¿Amelia también?
—Claro —respondió Bill rodando los ojos—. Me tengo que ir, nos vemos más tarde.
—Adiós, Bill —respondió Jörg antes de cortar la llamada.
—Ya, Simone llegara antes, y vendrá mi padre y mi madre —anunció Bill a los demás.
En ese momento llegaron Natalie y Chantelle con muchas bolsas. Tom se acercó a ayudarlas. Tranquilamente comenzaron a organizar la comida en pequeños pocillos, dejándolos ordenadamente en la mesa.
Tom se congelo—. Bill…
—¿Sí? —preguntó Bill al ver a su novio parado sin hacer nada.
—¿Le dijiste a tu padre que el Cumpleaños era sorpresa? —preguntó seriamente.
—No… —murmuro Bill silenciosamente. Tom deseo ser un elfo domestico para golpearse la cabeza contra la pared.
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Jörg camino tranquilamente a su oficina, agradeciendo mentalmente haber salido de ella para contestar la llamada de su hijo; su distraído hijo acababa de llamarle por segunda vez, para sugerirle dejar el Cumpleaños en sorpresa.
—¡Simone! —hablo entrando a la oficina, donde su secretaria lo esperaba para terminar de revisar unos papeles.
—¿Sí? —preguntó Simone alzando la vista.
—Ordena todo —pidió comenzando a ordenar sus cosas—. Hemos terminado.
—Pero… —Intento rebatir.
—Cariño, yo soy el jefe, así que he decidido que terminamos —aseguró sonriendo—. No te preocupes, no te pagare menos, ni nada que te imagines, te llevare a casa —anunció mientras salía de la oficina—. Te esperare en el estacionamiento.
Simone se quedó unos segundos en silencio, aturdida.
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—Espero que no te moleste —habló Jörg mirando a su secretaria—. Pero pasaremos a buscar a mi mujer; es que le tengo preparada una sorpresa… una sorpresa —Comenzó a reír.
—Claro que no —respondió Simone sonriendo. Subieron al auto y se dirigieron, en un cómodo silencio, en busca de Amelia.
Continúa…
*Doctor Dulittle es una película sobre un doctor que habla con animales.
**No sé sí en su país tienen el mismo nombre, pero aquí son conocidos por esos. En general, solo son “Comida chatarra”.
